sábado, septiembre 29, 2007

El hombre perfecto

Esta autora habìa decidido no dedicar POST a quien no tuviera un lazo sanguíneo con la misma, debido a que parece existir una maldición en ello. Creía firmemente en que mis POST dedicados indicaban el cercano fin de la relación (de cualquier tipo) con el destinatario.
Hoy decidí cambiar eso.
Decidí cambiar esa “maldición” y convertir este post PERSONAL y totalmente dedicado en una “nota enorme en tu cartera”. Así como mis fotos en tu celular y tus mensajes en mi hi5, como las noches de pláticas eternas y las mañanas tomando el sol.
Decidí cambiar la “maldición del Post dedicado” por los litros de MIS cafés y tus botellas de agua, por mis cigarros y tus cervezas. Por las veces que me has escuchado llorar... por las que te he visto bajar la cabeza y los hombros. Por las veces que has tomado mi mano cuando tiemblo, por las veces que respondiste tu celular a las 2 AM para decirme cómo comportarme ante una situación que no sabía controlar, por tus llamadas a mi oficina y las tardes-noches-madrugadas en tu oficina...
Porque te veo y veo en ti al hombre perfecto para alguien.
Porque te veo como ese hombre que DEBE ser el ideal para una mujer.
Porque te veo cada vez más fuerte y más sabio.
Porque soy testigo del paso de los años en tu vida... de todos esos años que nos han dejado tanto que aprender y un par de hechos que lamentar. Por las horas detrás del volante, los libros, la música...
Porque es tu voz la que escucho decirme las cosas que nadie quiere decirme.
Porque cuando todos dijeron “qué delgada estás” fuiste tú quien dijo “qué mal te ves, luces enferma”. Porque cuando todos hacían cumplidos, eras tu quien me regresaba a la tierra. Porque cuando todos decían “hazlo” eras tu quien decía “CONOCE”. Porque cuando pensé que me enterrarían en SU tumba el pasado diciembre y todos repetían “ya pasará” fue tu voz la que me dijo que JAMÁS dejaría de doler, que el hueco en mi pecho no se cerraría y que el frío no se me quitaría, pero que sabías que YO PODÍA vivir con ello; fue tu confianza en mi la que me hizo creer que viviría sin él cuando los pronósticos indicaban lo contrario (y lo sabemos).
... y fuiste testigo del “colapso” y me has visto aprender a respirar con calma. Gracias a tu experiencia he comprendido a quienes parecìan incomprensibles. Porque me has abierto las puertas de tu casa, de tus coches, de tu familia y me has dejado estar contigo...
Sé que nuestra “relación” es difícil de entender para la mayoría.
Sé que este texto se interpretará de mil maneras.

Sé que hay quienes jamás entenderán lo que tengo contigo... sé que habrá quienes JAMÁS crean que lo más cerca que has estado de mi boca ha sido cuando te beso la mejilla.
Hoy eso no me importa. Hoy sé que a quien realmente le importo, le importa mi relación contigo. Hoy pienso que a quien realmente le importas, mirará en mi a la AMIGA que también te cuida la espalda.
Porque debe haber quien entienda que respeto cada paso que das, que respeto cada decisión que tomas y cada vez que te alejas de mi... porque he entendido cada frase, porque me encantará verte FELIZ con alguien, porque sé que mereces a una GRAN mujer que sepa ver en ti aùn màs de lo que vemos quienes te queremos y porque sé que necesitaré alejarme de ti nuevamente en otras situaciones.
Porque salvaste mi vida un par de veces.
Porque tu nombre en “el grupo” simboliza que mamá dormirá tranquila.
Porque has sabido cuando dejarme sola.
Porque has sabido cuándo regañarme y colgarme el teléfono.
Porque has sabido ser TU.
Porque me conoces mas alla de lo que escribo y digo.
Sé que hay quien piensa que un hombre y una mujer no pueden ser “solo amigos”... en nuestro caso es cierto, no somos “sólo amigos”; somos GRANDES AMIGOS.
Eres mi mejor amigo... no desde hace 1 mes, no desde hace 6. Eres ENORME para mi y aunque nos veamos poco, eres una de las personas más importantes en mi vida.


FELIZ CUMPLEAÑOS


-y enójate y oblígame a borrarlo. Para mí SÍ hay mucho qué celebrar.

martes, septiembre 18, 2007

La analogía de las galletas

O simplemente "Lo complicado de lo simple"



La semana pasada, Kat dijo una frase que me recordó a cuando tenía 18 añitos y usaba dicha línea como "nickname" en el ICQ. Todo comenzó porque según yo, la cubierta de las galletitas que me encantan era de
harina y así lo creía hasta ese día en que Kat me informó que la cubierta de las galletitas por las que tanta afición profeso es nada más y nada menos que "icing sugar" (azúcar glass, en México).

"No sabes distinguir lo complicado de lo simple", dijo citando a Bunbury.

Tuve entonces que hacer introspección (y retrospección) para darme cuenta de que muchas veces he confundido con harina lo que es en realidad azúcar glass y viceversa... y a cual más le parece tan sencillo distinguir algo tan simple!!. Creo que esa dificultad para distinguir cosas tan simples me ha hecho complicarme gran parte de la vida.

Afortunadamente, siempre ha habido alguien o algo que me hace ver lo que había perdido de vista y con esa analogía empiezo.

Me encantaba algo que no podía siquiera describir adecuadamente. Me encantaba algo que no era lo que yo creía.

No por ello han dejado de gustarme esas galletitas; simplemente, después de eso, al comer una y saber que lo que hacía su cubierta deliciosa no era harina, mi galleta tuvo un sabor distinto; la disfruté poniendo mucho más atención a su sabor... y es que no es lo mismo CREER en algo que CONOCER algo.

No es lo mismo mirar que observar, no es lo mismo pensar que analizar. Analizando pude distinguir gran parte de los ingredientes y ello definitivamente fue una reveladora experiencia que me prometí repetir en muchos otros aspectos y el viernes pasado tuve oportunidad de comenzar mi nuevo proyecto de "análisis de elementos".

Tuve la grandiosa oportunidad de escuchar y observar un entorno que antes me parecía familiar, un entorno que creía conocer. Gracias a un sabio consejo que llegó a mí en forma de mensaje de texto al celular, me quedé quieta y en silencio observando con detenimiento un río revuelto que se formaba a mi alrededor y -siguiendo el mismo consejo- al no involucrarme en todo aquello que escuchaba y observaba, pude distinguir muchos detalles que jamás había notado; observé actitudes y miré todo tan ajeno a mí, que reconocí que muchos elementos de aquello que me parecía tan familiar no eran en verdad lo que tanto tiempo creí que eran.

Sentí nauseas en muchos momentos, llené hojas completas con letras y me llené de "notas mentales"... pero al final de la jornada me gustó saber en dónde estaba parada.

Me gustó entender un poco más nuestra "naturaleza humana".

"..and at the end of the day..." puedo decir que observando aquel río revuelto que aún parece negarse a la calma, he aprendido mucho más de lo que esperaba.



Agradezco sinceramente a todos los involucrados.


sábado, septiembre 08, 2007

Dime que me amas

"Make the lie big, make it simple, keep saying it, and eventually they will believe it"
-Adolf Hittler



De alguna manera nos gusta sentirnos "cómodos", cómodamente felices, cómodamente activos, cómodamente interesantes, cómodamente seguros, comodamente tranquilos.


Por otro lado, tenemos un "estándar" para alcanzar tal "comodidad" que rara vez externamos y es ese "estándar" en el que necesitamos tener un "ALGO" para estar bien. Muchas de nuestras ideas entran por el oído; es decir, escuchamos algo, lo repetimos y la PNL se encarga del resto: hacerlo real. Tan real como un cerebro, siendo un mundo INDIVIDUAL puede hacerlo. Así lo escuchado sea una mentira, así al escucharlo sepamos que es una mentira: si queremos creerlo, lo hacemos y la mentira se convierte en algo cierto.

Conozco a muchas personas que se mudan a mundos perfectos, con vidas perfectas. No tienen problemas, no tienen dudas. En esos mundos tan propios ellos son felices y respeto esa felicidad. Se mienten a sí mismos y escuchan mentiras que los hacen felices porque esas mentiras les dicen exactamente lo que quieren escuchar.

Enfocándome un poco más en las relaciones humanas -para no variar- me topo con el factor "X".


¿Qué es lo que necesitas para sentirte BIEN con alguien?

¿Cuántos de nosotros no hemos caído en el "vicio" de mentir sobre lo que sentimos, sobre cómo nos sentimos para hacer sentir bien a alguien? ¿Cuántos de nosotros no hemos dicho que haríamos cosas que jamás nos pasaría por la cabeza hacer solamente para que alguien más se sienta "tranquilo"?

¿Saben algo? la mayoría de las veces, la otra persona sabe exactamente que mentimos. Somos, inocente o convenientemente víctimas de manipulación emocional muchas veces. ¿Por qué menciono el "convenientemente"? simple, si en realidad sientes NADA por alguien, no te interesa decirle que lo-la amas, a menos claro, que haya un interés en ello. Intereses hay muchísimos y están desde el sexual -a mi criterio es por sexo por lo que los seres humanos mentimos más frecuentemente- hasta el laboral.

La otra cara de la moneda es la parte que requiere ese "factor X" para sentirse bien.

En caso de realizar algún tipo de introspección frecuentemente, ese "alguien" sabe que la otra parte solamente está diciendo lo que quiere escuchar, así que
¿por qué lo acepta?

CREO -recordemos que es solamente MI opinión- que sigue siendo mucho más fácil escuchar a los demás que escucharnos a nosotros mismos. Creo que sigue siendo mucho más fácil justificar ciertas "excepciones" a esas normas sociales de las que derivan muchas de nuestras "reglas autoimpuestas", incluso mucho más fácil justificar nuestra conducta ante nosotros mismos pensando que "ÉL DICE / ELLA DICE QUE...". Creo que sigue siendo mucho más cómodo actuar convenientemente de acuerdo a algo que "alguien dice" a actuar por iniciativa propia.

Creo que muchas veces creemos normal vivir escuchando mentiras que nos hacen sentir bien.

Desafortunadamente siempre hay un momento en que una de las partes termina dejando al descubierto la verdadera intención del mentir... y entonces hay lágrimas y drama y reproches que invariablemente involucran la frase "TU DIJISTE QUE....". Y aquí pueden pasar mil cosas, como que se vuelva al inicio del ciclo y se vuelva a mentir para que el "afectado" o la "afectada" se sienta mejor o que simplemente nos demos cuenta de que invariablemente de la forma en que mintamos, de nuestro motivo para mentir y de nuestra justificación para proceder de cierta forma, la intención era la de obtener un "algo".

Pero...¿por qué tanto drama si desde el principio sabíamos que estabamos creyendo una mentira? es cierto, la escuchamos tantas veces que decidimos creer en ello, pero no deja de ser una mentira.

Personalizando lo anterior y repitiendo algo que he tratado desde que comencé a publicar:

Chicas: Cuestión de analizar la situación. No existe el hombre perfecto! No existe el príncipe azul. Existen los HOMBRES grandiosos, que como seres humanos tienen defectos. Si pretendemos omitir esos defectos, podemos tratar de olvidar que el chico en cuestión es un HOMBRE REAL o un verdadero patán y convertirlo en el "Príncipe Azul"; técnicas para que él mismo se sienta comprometido a portarse como príncipe hay muchísimas y son conocidas por la mayoría de las chicas con las que he tratado a lo largo de mi vida, pero vamos! Si preferimos que nos mientan para sentirnos bien por hacer algo y orillamos a nuestro "Príncipe" a mentir y repetir esa mentira para estar tranquilas, tratemos de no reprochárselos si el fín de la historia no es como el "Cuento de Hadas" narra.

Chicos: Cuestión de usar la CABEZA. ¿Necesita que le mienta? ¿VALE LA PENA EL DRAMA posterior? ¿Vale la pena herir a un ser humano -porque realmente hay inocentes que lo creen- por obtener algo?


Para todos:
Somos responsables absolutos de lo que sentimos y creemos. Somos libres de creer en lo que queramos creer y humanos para reconocer que nos equivocamos.
Cada ser humano es dueño de sus acciones, de sus ideas y si aprendemos a CREER en lo que nos decimos a nosotros mismos, aprendemos a abrir los ojos y a responsabilizarnos de lo que hacemos y creemos, dejaríamos de "sentirnos engañados" y probablemente comenzaríamos a sentirnos LIBRES.