La Bruja del Cuento
Solo nosotros somos responsables de nuestras inseguridades.
Tenemos el poder de ser dueños de nosotros mismos y ello comienza con hacernos dueños de lo que pensamos y de la forma en que ello nos afecta y nos hace reaccionar.
Desde pequeños escuchamos palabras que nos “marcan” de alguna manera, leemos frases, sentimos miradas y vivimos experiencias que nos hacen crearnos conceptos de lo que nos rodea y conceptos de nosotros mismos. Al crecer vamos agregando y eliminando "etiquetas", etiquetas sociales, sentimentales, intelectuales... etiquetas propias. Cuando nos hacemos la pregunta obligada de "¿QUIEN SOY?" tratamos de encontrar en nosotros a quien queremos ver, a quien creemos ser. Descubrimos entonces un concepto, lo materializamos y a partir de ahí somos esa persona.
Si decido ser fea y tonta lo soy.
Si decido ser bonita e inteligente lo soy.
Si decido ser yo, con colores y formas, lo soy.
Son esas "etiquetas" las que nos pueden hacer inseguros, no los demás. No podemos ir por la vida culpando a ex parejas, ex amigos o familiares de la forma en que nos vemos a nosotros mismos ni de la forma en que reaccionamos.
Si somos inseguros en cualquier aspecto, cualquier persona o situación nos puede parecer una amenaza y entonces un conflicto interno tiende a crear una verdadera guerra. En una relación sentimental comienzan las prohibiciones, las peleas por "otras personas" y comienza -creo firmemente- el deterioro de la relación.
En ese mismo ámbito podemos prohibir, tratar de cambiar a la otra persona para que satisfaga nuestra necesidad de estima o afecto, podemos exigir... el resultado siempre será el mismo y es que si no nos respetamos a nosotros mismos no podemos respetar a las demás personas y sin respeto dudo que una relación pueda funcionar bien.
Podemos excusarnos en que los celos son producto del "amor" cuando creo que los celos son resultado en gran medida de nuestra propia inseguridad.
Creo que parte del éxito de una relación son el respeto y la confianza.
Creo que parte del éxito de una relación es la libertad.
Una relación está cimentada en el concepto que ambas personas tienen de la relación en sí y por ende somos libres de sostener una relación aún basada en celos, desconfianza, inseguridad y prohibiciones.
Creo en la libertad de elegir el lugar en el que estás y en que ello merece respeto
Supongo que seguiré siendo considerada "La Bruja del Cuento" de alguien algunos años más.